La obra de Broadway llevada a la pantalla grande, nos muestran el talento de la única hija de Judy Garland: Liza Minelli, con una voz inigualable y un talento espectacular, dijeron los críticos de cine: “Nadie como Liza”.Basada en la novela “Adiós a Berlín” de Christopher Isherwood, se hizo ganadora de varios premios cinematográficos, y preservada en el archivo de la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos.
Estrenada en 1972, esta película cambió la pauta de los musicales para siempre, entrando en la revolución de los años 70´s sobre la temática de los temas fuertes en el mundo del celuloide.
Los actores secundarios están conformados por excelentes talentos: Michael York, Joel Grey, Marisa Berenson, Fritz Wepper y Helmuth Griem, ayudan a conformar la historia ambientada en Berlín en la República de Weimar en el año de 1930.
Cabaret narra la decadencia generada por la ascensión al poder del partido Nazi, y el único escape es el Kit Kat Club, un cabaret en el que Liza es una cantante estadounidense de nombre Sally Bowles.
Un perverso maestro de ceremonias interpretado por Joel Grey, es el narrador de la película, apoyado por los números artísticos que reflejan con un inteligente sarcasmo e ironía, la situación por la que está atravesando el país, y el mundo.
A pesar de que los números musicales son divertidos y dinámicos dándole originalidad a la película, los temas crudos y fuertes que se plasman en ella: la homosexualidad y el aborto, fueron blanco de muchos vetos a lo largo del globo.
Sin embargo, se estrenó en las pantallas de todo el mundo, siendo un éxito en taquillas, debido al toque fresco y original con que se plasmó la segunda guerra mundial. Romance, ambición, corrupción, dinero, guerra, todo esto en la cápsula de cabaret, con un final magistralmente planeado: la coreografía del público con los uniformes nazis, anunciando de manera fatal, el reinado de un partido que cambiaría al mundo para siempre. Adiós república de Weimar, adiós.
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