1 de enero de 2010

Cinema Paradiso de Giuseppe Tornatore (1988)


¡Márchate! ¡No quiero oirte más! ¡Solo quiero oir hablar de ti!
No vuelvas, no escribas, no llames, hazme caso, hagas lo que hagas ámalo, como amabas la cabina del Cinema Paradiso…

Alfredo a Totó

Película que te mueve hasta la última fibra de emociones, un pueblo Siciliano donde toda la vida giraba en torno al Cinema Paradiso, el único entretenimiento del lugar, pintoresco y visceral como todos los pueblos, donde la magia del cine hace de las suyas para evadir las vidas comunes y corrientes de todo aquel que se atreve a soñar.

Alfredo (Philipe Noiret ) era el cácaro del cine, el alma del pueblo, el encargado de editar todas aquellas “indecencias” que el sacerdote le ordenaba eliminar: besos castos, insinuaciones sexuales, todo aquello que “corrompiera” el alma sana de todo buen cristiano.

Bello homenaje al género cinematográfico, Salvatorre o Totó (Jacques Perrin), un niño que se vuelve el amigo inseparable de Alfredo, crece, se enamora y se hace hombre en Cinema Paradiso, ahí aprende de montajes de fotografía, pero lo más importante: a amar el cine.

Pasado el tiempo Alfredo pierde la vista en un incendio del Cinema, Totó se vuelve el cácaro del pueblo, vive su primera experiencia de amor, el pueblo Siciliano cambia, Salvatorre crece, Alfredo le insiste en que es enfermizo vivir a través de los personajes del cine… lo quería tanto que lo mandó lejos de ese pueblo...a que cumpliera sus sueños e hiciera sus cosas con el mismo amor que en cinema paradiso...mocos seguros...

Película que ningún cinéfilo de corazón se debe de perder, ahí aprecias el amor al séptimo arte, lo más bello y conmovedor: un regalo de Alfredo a Totó con todas las escenas prohibidas, un hombre que mira a su pasado y se encuentra a si mismo con una nostalgia espantosa que te hará lagrimear como cocodrilo toda la noche…

Ganadora del Oscar a Mejor Película extranjera, Globo de Oro, BAFTA, la palma en Cannes, el European Film Award, filme indispensable en sus bibliotecas, un pueblo tan latino y sentimental que recorre toda experiencia vivida al espectador que la observa. Una delicia cinéfila.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Comenta la Nota